No hay nada peor que ganar por Walkover

Puto día. Imaginaba que por ser viernes sería bueno. Y lo fue en cierto sentido. Hoy el vaso estuvo medio vacío.

Comenzamos el día con la clase del frentón. Llegue a la hora, por fín, y nos dio la oportunidad de leer. Andaba más gentil que nunca y además nos felicitó por un trabajo que no hicimos.
Luego la prueba del libro. Yo, que llevé un resumen al colegio, que todos leyeron, y se lo conté al Peluquero, me sentía demasiado seguro. Pero la prueba me costó más de la cuenta y quiera Dios me haya ido bien.
Luego hice la guía de Matemáticas y los apuntes del taller. Todo preparado para jugar el campeonato normal de los viernes.

Antes fui a entregar el trabajo de química al profe. Le entregamos la mitad metiéndole el pico en la oreja con una chiva echándole la culpa al peluca. Y que la segunda mitad se la llevo el Kike xD.
Me fijé que me llamaban. Era la Valeria, mi ex-compañera. La saludé y solamente ahí me dí cuenta que vino con la hermana, pero no la pesqué. Hablé cinco palabras y me deshice de la molestia diciéndole que me esperara un momento. No volví.

Fui a comprar el almuerzo al Pollo a la Puerta. Me negué a comprarle comida a una cabra del colegio riéndome en su cara y salimos. Me topé en Cumming c/ Mapocho con la Vale. Venía con la Paulina y la Pancha (y obviamente su hermana). Para no ser descortés me despedí y caminamos al colegio.

Comimos en el casino. Era tan grotesca la forma en que comía, que hasta el profe César me jodió con un buen chiste. Volvimos al gimnasio. Estaba jugando el IVºA con el IIºA y el John, el encargado de todo nos dijó:

No tienen rival. El 8ºB no se presentó.

Me ofusqué pero de manera controlada. El único remedio para no quedarse con las ganas era jugar un rato en el patio central. Después nos topamos con el Mitchel. No le dí la mano a menos que su curso se disculpara (JÁ) y al Buda tampoco. Al final nos fuimos el Aram, el Gaviota, el Pescao, el Mitchel y yo a jugar taca-taca. La pasamos la raja, weiamos caleta. En el intertanto, de la nada apareció una MINA que venía con su madre a entrevistarse para la admisión, al parecer, al IIº del 2009. Ojalá, si queda, que lo haga en nuestro curso y no en el de los cretinos del A.

Nos fuimos en micro. El Gaviota y el Pez por su lado, el Aram con el Mitchel y mi magnificencia por el otro. Tomamos la 503 (¡uf!) y jodimos un rato contando anécdotas. Mientras viajábamos, una mujer medio robusta casi cae encima mío, probablemente pudiendo hacerme mierda, como ella misma dijo. Me reí poniéndome más rojo que tula de perro y nos acordamos del Orejón.

Nos bajamos todos después, yo al último obviamente, y ví a una negra pasando al lado mío, bastante buena, y no me dí cuenta al cruzar la calle que venía un auto. Su bocina lo salvó de chocar contra un muro humano y de provocar eventualmente 2 muertos (iba con una copiloto). Caminé hacia mi casa. Mi papá estaba justo saliendo. Lo saludé a él y a mi tata y entre a casa justo a ver Los Simpson.

Fin del comunicado. Muérete.